El mundo de la ciencia está completamente descolocado por culpa de un ciudadano español. Los físicos más importantes no se explican cómo es posible que Felipe Juan Froilán de Marichalar y Borbón, el sobrino de Felipe VI, esté en seis discotecas a la vez. “No es solo que esté en seis locales distintos simultáneamente, es que esos locales se encuentran en diferentes ciudades”, aseguran.
El hijo de la Infanta Elena aparece a la misma hora en numerosas fiestas que se celebran en lugares alejados unos de otros, lo que provoca estupor tanto entre los asistentes como en la comunidad científica. “Es una especie de gato de Schrödinger, aunque en su caso, en lugar de estar vivo y muerto a la vez, está en una fiesta y en otra al mismo tiempo”, expresan con asombro.
Tener a Froilán geolocalizado ha arrojado algunos datos que desafían las leyes del espacio-tiempo. “Vemos que ayer por la noche estaba en este after de Madrid, pero al mismo tiempo estaba en una casa de Barcelona, en una discoteca de Vigo y en un hotel de Ibiza”, señalan los agentes que estudian sus movimientos, totalmente anonadados. “Sin duda es el rey de la noche”, añaden.
No es la primera vez que un Borbón sorprende a la comunidad científica. Su abuelo Juan Carlos I ya asombró al mundo al convertirse en garante de la democracia española habiendo sido designado a dedo por un dictador fascista.