Pese a las profundas quemaduras que tiene en el empeine y las profundas heridas que le causan las tiras, Fermín García, de Alicante, asegura que «ir en sandalias es lo mejor del verano» y se le antoja difícil e incluso peligroso ir con zapatos y con el pie cerrado y sin ventilar. «Es saludable que pase el aire entre los pies», ha declarado García ante la prensa y sin hacer referencia a los tres clavos que ha pisado hoy y que le han provocado esas heridas profundas.
En su defensa de las sandalias, García tampoco ha querido mencionar ante la prensa el hecho de que su velocidad máxima de desplazamiento es de 0,5 kilómetros por hora ni que sufre dolorosas contracturas musculares en la parte de baja de las piernas. «Son comodísimas», insiste.
«Estética veraniega y fresquito entre los dedos… ir en sandalias es como pasear por la playa todo el tiempo», ha dicho justo antes de pisar un charco de agua sucia que infectará sus heridas y provocará que tengan que amputarle ambos pies de aquí a tres días (algo que le impedirá no solo llevar sandalias sino cualquier tipo de calzado).
García, que lleva pantalones cortos y por lo tanto parece un niño de un cuento dickensiano al que resulta absolutamente imposible respetar y tratar como un adulto, dice no entender a las personas que insisten en llevar pantalones largos.