Javier Parrondo, de 67 años, acudió ayer al Hospital Quironsalud San José de Madrid para someterse a una colonoscopia y el médico no tardó en hallar varias facturas falsas recubriendo las paredes del recto. «Hay un papel de Panamá adherido al plexo hemorroidal interno que podría acabar provocando molestias con la Agencia Tributaria», informó el facultativo.
Parrondo asegura que, cuando se decidió a pedir cita en un centro de Quirón, no sabía nada de los tejemanejes de la pareja de Isabel Díaz Ayuso ni de los supuestos chanchullos con esta compañía del sector sanitario. «Están escondiendo pruebas en los cuerpos de los pacientes porque saben que un juez nunca dictaría una orden para examinar el colon de una persona inocente», razona el afectado.
El paciente denuncia que fue a que le hicieran una colonoscopia y le acabaron «dando por el culo». Y añade que esto no quedará así: «El médico se negó a extirpar las facturas falsas porque no quiere que lo acusen de destrucción de pruebas ni de obstrucción de la justicia por la vía rectal. Pero le he enseñado mi ano a un abogado y dice que hay caso. Caso clínico y caso penal». El hombre niega tajantemente haber intentado que le blanquearan el ano.
El grupo Quirón defiende que no es responsable de lo que sus clientes alberguen en el colon y pide que no se politice el recto de la ciudadanía.