Los comentarios despectivos sobre el propio examen de Selectividad al ser consciente de que las opciones para salir adelante en el futuro son nulas bajarán un 10% la nota en los exámenes, según el plan que prevé aprobar el Gobierno antes del comienzo del próximo curso. Así lo establece el borrador de decreto que regulará este examen que el Ministerio de Educación envió el viernes a las comunidades autónomas y al que ha tenido acceso El Mundo Today. Se pretende, de esta manera, que el alumnado deje de pitorrearse de las pruebas de acceso a la universidad al ser consciente de que tener una licenciatura no le servirá absolutamente para nada.
Escribir “aaaaahhhhhhhhh” y “socorroooooo” en medio de las respuestas también contará como error.
Educación se ha decidido a cambiar la normativa de la EVAU (Evaluación de Acceso a la Universidad) después de que los correctores alertaran del aumento de comentarios de carácter nihilista en las respuestas de los alumnos, como por ejemplo “Dudo que no cometer faltas de ortografía me vaya a ayudar en el frente, cuando me recluten para ir a la guerra” o “Sé que moriré acuchillado por asaltadores que querrán robarme la última garrafa de agua de mis reservas personales, pero ok, aquí os describo las dos grandes líneas argumentales de La vida es Sueño de Pedro Calderón de la Barca, protagonizadas por Rosaura y Segismundo, con sus coincidencias y divergencias”.
Las modificaciones, que recoge el borrador del Real Decreto que ha enviado el Ministerio de Educación a las Comunidades Autónomas, incluyen cambios en el método de calificación para erradicar el cinismo, el descreimiento, el pesimismo y la desilusión, cada vez más presentes en las respuesta de alumnos. Unos alumnos que, en principio, aspiran a estudiar cuatro años una licenciatura con la que preparar su futuro, “por lo que cuestionar dicho futuro debería penalizar en los tests de acceso a ese futuro”.
Así, por ejemplo, escribir en las pruebas de Matemáticas, junto a los resultados, “No, si de matemáticas voy bien, pero qué más da si el capitalismo ha colapsado y tampoco es que vaya a usar ese conocimiento para calcular una hipoteca que jamás me van a conceder, ¿no? Para calcular los 120 euros de media que voy a tener en el banco no necesito tanto nivel, pero en fin, ahí tenéis los coeficientes de a, b, c y d de la función n f(x) = ax3 + bx2 + cx + d si se sabe que la ecuación de la recta tangente a la gráfica de la función f en el punto de inflexión (1, 0) es y = –3x + 3 y que la función tiene un extremo relativo en el punto de la gráfica de abscisa x = 0” podría hacer que un alumno con un 5 rascado finalmente suspendiera.
Esos comentarios suponen que el alumnado, por más que haya respondido las preguntas correctamente o esté demostrando “reflexión y madurez” a la hora de responder, no respeta el sistema educativo ni el propio examen. Según Educación, cuestionar la utilidad de los conocimientos que se evalúan escribiendo frases como “Preferiría responder alguna pregunta realmente útil sobre cómo puedo transformar mi orina en agua potable o sobre cómo puedo transformar un palo con un clavo oxidado en la punta en una arma mortífera con la que defender a mi familia, pero aquí tenéis, qué se le va a hacer, una estúpida comparación entre el escepticismo cartesiano y el de Hume…”, restará puntos desde el próximo curso.
Educación también concreta que los alumnos pueden acudir a los exámenes con calculadora, diccionario o fórmulas matemáticas pero en ningún caso con una máscara antigás, pins o chapas con el lema “No Future” o camisetas de la película “Mad Max” que puedan desmoralizar “no ya al resto de alumnos, sino también al propio corrector”.
