«La conclusión de esta investigación, no, espera, ahora la llamo yo, mira, este pájaro creo que es de la familia de los córvidos y estoy pensando ahora que mañana me caducaba el certificado digital, bueno, cuando termine de… mañana, que es sábado, llamo a Antonio y le comento aquello de, vamos, tiene que ser un córvido, por el pico que tiene». Con estas palabras resumía Carlota Curra Filgueira el contenido de su tesis doctoral, centrada en el déficit de atención y defendida este mediodía en el salón de grados de la facultad de Psicología de la Universidad de Vigo. El jurado ha valorado «la amplitud de temas» que abarca el trabajo y ha elogiado de Curra la implicación personal en su objeto de investigación.
La investigadora, que busca en estos momentos peluches de Pokémon para su sobrino en la web de Amazon, no ha podido retener el veredicto del jurado, por lo que en estos momentos ignora si ha aprobado o no. «Me han dado un papel, pero creo que lo he perdido porque, mira, esto es el ticket del parking. Tengo que llevar el coche a revisión, pero no sé si el taller abre esta tarde. 30 euros por un Snorlax, increíble», comentaba poco después de la lectura de la tesis.
El entorno de Carlota Curra asegura que, antes de empezar la tesis hace cuatro años, no era tan dispersa. «Podría ser peor, podría haberse centrado en las conductas psicopáticas, que era su idea inicial», explica uno de sus compañeros.
Al preguntarle si está satisfecha con la lectura de su tesis doctoral, la mujer ha asegurado que esta noche, en teoría, cena con su madre, pero no recuerda si llegó a confirmar.