En una comparecencia ante los medios en la sede de la entidad en Nueva York, António Guterres, secretario general de la ONU, ha urgido hace escasos minutos a que se abra un corredor humanitario para asistir a la población española afectada por el asedio independentista iniciado tras el reciente pacto entre PSOE y Junts per Catalunya.
«Se debe permitir la salida del país de todos los represaliados del sanchismo, no hay tiempo que perder, cada momento cuenta», ha puntualizado Guterres, recordando que la investidura de Pedro Sánchez es cuestión de días. Las palabras de Carles Puigdemont certificando el acuerdo han sembrado el terror en la capital de España, donde se habla ya de dictadura.
Poco después de la intervención de la ONU, la organización Cruz Roja Internacional solicitaba acceso a las fronteras españolas para proporcionar fachalecos salvavidas a los Cayetanos y gafas de sol Hawkers para que puedan proteger sus ojos de los gases lacrimógenos.
«Hay que hablar sin eufemismos: lo que se está viviendo en España en estos momentos es un acuerdo político fruto de una correlación de fuerzas salida de unas elecciones democráticas», ha señalado el secretario general de la ONU. «Debemos acceder al terreno para que todas estas personas afectadas por los pactos entre partidos políticos reciban la asistencia que necesitan», ha agregado con severidad al término de su alocución.