Alejandro T., un hombre de 34 años que, según dice, tenía que haberse suicidado esta misma mañana, ha vuelto a procrastinar y se ha pasado el día recogiendo el escritorio y haciendo la compra. “Sí, sí, enseguida me pongo con lo del suicidio, si lo tengo clarísimo, pero me he vuelto a liar”, ha declarado excusándose.
“Cada día me pasa lo mismo, decido acabar con todo y termino perdiendo el tiempo haciendo otras cosas o simplemente siguiendo con vida”, ha explicado.
A última hora, la prensa ha podido saber que Alejandro T. ha decidido suicidarse arrojando la tostadora a la bañera y ha acabado limpiando toda la cocina y ordenando el armario de las fiambreras durante toda la noche.