Asumiendo que sus principios morales tienen un precio y que ese precio son los 11 o 12 euros que está costando el kilo de judías verdes en estos momentos, miles de veganos españoles han decidido volver a comer carne, según han informado a la prensa desde diversas asociaciones. “Si no se puede, no se puede”, han admitido los veganos, muchos de los cuales se han visto obligados a abandonar unos principios éticos y políticos que llevaban cumpliendo a rajatabla desde hace décadas.
“Y, ojo, vamos a juzgar desde nuestra superioridad moral a todo aquel que se atreva a pagar semejantes precios por unas judías de mierda”, han avisado desde diversas asociaciones veganas, como la Asociación Española de Veganos o el Círculo de amigos del Tofu. Los veganos, tras deliberar profundamente sobre sus propios principios morales, han llegado a la conclusión de que, entre la inmoralidad de pagar las judías verdes a 12 euros “y matar a una cabrita recién nacida a mordiscos”, es mucho más “ignominioso, cruel y despiadado” lo primero.
“No es bueno para el planeta pagar las judías a según qué precios”, insisten los veganos.
Respecto al aceite, las diversas asociaciones pro-derechos de los animales admiten que, a día de hoy, es inhumano pagar el aceite de oliva y es preferible optar por alternativas animales como la manteca.
Así, y hasta nuevo aviso, el 80% de los veganos sustituirá los vegetales (en especial las judías verdes, pero también el pimiento, que está al precio inhumano de 6 euros) por chóped y otros productos cárnicos de precio reducido. De todos modos, el colectivo avisa: “vamos a seguir diciendo ‘soy vegano’ incluso cuando estemos comprando embutido en la charcutería porque hay cosas a las que no podemos renunciar”.
A última hora, la industria cárnica ha informado a los veganos de que el porcentaje de carne que contiene el chóped es el 0%.