Pedro Sánchez está dispuesto a conceder la amnistía a todo el separatismo. No solo a los ideólogos como el fugado Carles Puigdemont, sino también a las facciones más violentas del independentismo, como innumerables CDR y, como mínimo, cinco botellas de Fairy que fueron un puntal clave en las protestas de ese otoño de 2017, haciendo resbalar a los policías para que, posteriormente, el suelo catalán les golpeara.
Esta son las cinco botellas de Fairy que el gobierno de Pedro «El mentiroso» Sánchez tiene pensado amnistiar porque, para el PSOE, estas botellas tienen más derechos que tú y que yo. Porque todo vale para que haya investidura y pueda perpetuarse en el poder gracias a los votos de los españoles, como en una auténtica dictadura.
Esta botella de Fairy no derribó a ningún policía pero hizo resbalar a tres que necesitaron tratamiento psicológico por el susto.
Esta botella de Fairy se fugó de España con Carles Puigdemont en el maletero de un coche.
Esta fue indultada junto a Junqueras, con quien llegó a compartir celda.
Esta sigue cumpliendo condena por agresión en Cuatre Camins y saldría libre a la calle, dispuesta a volver a provocar resbalones.
Esta otra tiene inmunidad por ser eurodiputada por Junts y, si Sánchez la amnistía, jamás será juzgada, porque parece que hay personas (y botellas de Fairy) que están por encima de la ley.
