Viendo los acuerdos políticos que se están produciendo tras las elecciones autonómicas, Sebastián Trujillo, un padre de familia natural de Vitoria, ha decidido que en las elecciones generales votará a Vox a través del PP para que sus hijos no lo tachen de fascista. «Tendré la conciencia tranquila sin necesidad de aguantar sus quejas», se sincera Trujillo.
Aunque las políticas de Vox le resultan atractivas, es consciente de que votar a la formación de extrema derecha no está bien visto en algunos sectores de la sociedad, especialmente los democráticos. Por eso ha optado por dar un rodeo votando al Partido Popular «y luego ya que ellos se unan después de las elecciones».
«A mí nadie me podrá decir que soy facha porque yo a los de Vox no los voy a votar», insiste Trujillo. “Confío, eso sí, en que los populares no me fallen y pongan a Abascal de vicepresidente», dice.
Por su parte, los hijos de este hombre lo que harán será votar a Bildu a través del PSOE para que su padre no los llame terroristas.