Por primera vez en algún tiempo, tu pareja te ha mirado con deseo, pero sospechas que quizá no es tanto deseo-deseo sino que su vibrador se ha quedado sin batería. Sal de dudas con las siguientes pistas:
- Ha intentado guardarte en el cajón al acabar, por pura inercia: no has recuperado la chispa.
- A medio coito, en vez de gritar tu nombre, se ha despistado y, por la costumbre, ha gritado «oh, sí, Durex Intense Orgasmic Pure Fantasy, sí»: no has recuperado la chispa.
- Te ha dicho explícitamente «mira, el cacharro este está sin batería otra vez y yo tengo la cocina pidiendo comandas, así que, si quieres, puedes aprovechar la oportunidad»: no has recuperado la chispa.
- Lo que te ha pedido no es practicar sexo, sino llamar a Iberdrola para preguntar si puede enviar electricidad «más rápida» para «una cosa»: no has recuperado la chispa.
- Antes de proponerte hacer nada contigo, la has visto abrir los mandos de todos los electrodomésticos de casa buscando pilas: no has recuperado la chispa.
- Le dejas tu vibrador y lo usáis ambos por turnos: tampoco has recuperado la chispa, tenéis una relación sexualmente sana pero ella no te ama y, de hecho, está aterrada ante la posibilidad de morir sola.