El Vaticano está estudiando cambiar la versión oficial para crucificar a Jesús dos veces y poder alargar las vacaciones de Semana Santa, según confirman fuentes de la curia vaticana. Desde la Santa Sede consideran que los festivos son demasiado pocos, de modo que la Semana Santa no puede competir hoy en día con la Navidad o el verano.
“Si la gente se creyó lo de que resucitó a los tres días, también se creerán que lo crucificaron dos veces”, se sincera el Papa Francisco. La idea que más gusta en el Vaticano es la de decir que, tras resucitar a los tres días, Jesús fue descubierto y lo volvieron a crucificar. “Así la Semana Santa duraría dos semanas y tendría mucho más tirón”, argumentan. «Luego ya diremos que volvió a resucitar o lo que sea», añaden.
Aunque ahora los esfuerzos están volcados en alargar las vacaciones de primavera, en el Vaticano también se está valorando decir que Jesús nació dos veces para poder tener dos Navidades al año. En la Santa Sede no gusta que las vacaciones de verano no sean religiosas y por este motivo valoran defender que Jesús nació, por ejemplo, el siete de julio. “Y a los siete meses volvió a nacer, el siete del siete”, afirma el Papa. “Si utilizo un tono solemne, los cristianos se creen cualquier mierda”, explica.
No es la primera vez que los jefes de la Iglesia Católica se inventan algo para mejorar la vida de la sociedad: hace quinientos años ya se inventaron la existencia del infierno para que millones de indígenas aceptaran servir a los cristianos.