Estos días, conforme se acerca el fin de 2022, los principales medios de comunicación aprovechan para ofrecer resúmenes con los sucesos de actualidad que han marcado los últimos doce meses. En muchos de ellos aparece un hombre en traje que pocos recuerdan, y quienes lo hacen lo asocian al pasado remoto de la política española. Su nombre es Pablo Casado.
«Creo que fue concejal o algo, pero en los noventa. Se les ha colado», señalaba un usuario de Twitter esta mañana. «¿Este no anunciaba remolachas en los ochenta?», aventuraba otro.
Según confirman los expertos en actualidad política, Casado aspiró a presidir España aunque la mayoría no lo recuerde. De hecho, no fueron pocos quienes lo votaron en las anteriores Elecciones Generales. Hasta abril de 2022, fue nada menos que presidente del Partido Popular, según admiten fuentes de esta formación. «Tenía despacho aquí y todo, sí. Eso dicen los que se acuerdan de él. Y sí, eso fue este mismo año», certifican desde el PP sin ocultar su propia incredulidad.
«Del ‘spinner’ sí me acuerdo. Era como una peonza moderna, se puso muy de moda y luego nada. Pero de Pablo Casado ni idea. Eso ya es para muy frikis», concluía hoy la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso, que se supone que fue compañera del tal Casado durante un tiempo.