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La mujer que robó un bebé se mete a monja para lograr la impunidad y evitar pisar la cárcel

"ES UNA TRADICIÓN ESPAÑOLA Y NO HAY NADA QUE PODAMOS HACER", CONFIRMA EL MINISTERIO FISCAL

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Una mujer que raptó anoche un bebé en el hospital de Basurto ha sido detenida pasadas las 10:30 horas en Zorroza y liberada de inmediato al descubrirse que había ingresado en un convento, que se ha hecho monja esta madrugada y que, por lo tanto, es imposible procesarla. «Maldición, qué lista es», ha dicho la Policía al comprobar que no tenía sentido la detención porque, al ser monja, quedaba ya impune el robo de bebés y es prácticamente imposible que la mujer acabe en prisión.

«No hay nada que podamos hacer porque el hecho de que se haya hecho monja implica que su tendencia a robar bebés no solo es completamente normal y esperable sino que, además, no debe suponer ninguna sorpresa ni para la familia del bebé ni para los médicos ni para las autoridades», ha explicado a la prensa un portavoz de las autoridades, pidiendo respeto para la novicia.

Tras la detención, que ha durado solo unos minutos al comprobarse que la mujer vestía los hábitos, han sido los propios policías los que han dudado sobre lo que tenían que hacer y, finalmente, le han devuelto el bebé «robado» a la monja y han informado a la familia, que no podrá recuperar a su pequeño.

«Ahora está casada con Dios y él es el único que puede juzgar sus actos», confirma un magistrado consultado por este diario. Según dice, tampoco está claro que la familia del bebé vaya a recuperar al menor, dado que «una vez la monja lo toca, es suyo y de la familia a la que haya planeado venderlo, tal y como se ha hecho siempre en España».

«Mecachis, qué mala suerte», ha comentado a la prensa la madre de la criatura, que tendrá que esperar ahora 20 o 30 años a que su hijo legítimo crezca y se dé cuenta, por sí mismo, de que la familia con la que crecerá no es la suya y empiece que buscar a sus padres biológicos en programas de televisión.

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