Lula da Silva ha ganado con un estrecho margen las elecciones a la presidencia de Brasil y su rival, Jair Bolsonaro, se ha mantenido en silencio hasta que, hace unos minutos, ha decidido finalmente comparecer luciendo un gorro y unas pieles de búfalo que han alarmado a la opinión pública. «Voy disfrazado de hombre que asalta el Capitolio, el americano, tranquilos», ha asegurado el político de ultraderecha, recordando que «es Halloween y toca disfrazarse».
Al ser preguntado sobre la victoria de Lula, Bolsonaro ha respondido señalando «lo bien que me quedan esas pieles» y reconociendo que «cuando llevas un buen disfraz, es inevitable ponerte en el papel del personaje». Aunque luego ha matizado sus palabras: «Pero no, eh… quiero decir… es Halloween y esto es un disfraz, como os he dicho».
El político derrotado en los comicios se ha negado a comentar los resultados electorales y ha asegurado que su comparecencia tenía por objeto «mostrar a los brasileños el disfraz que he elegido», insistiendo en que «me siento cómodo en esta piel».
Bolsonaro ha terminado su alocución levantando el puño y profiriendo alaridos guturales. Los expertos consideran que su reacción sí puede tener que ver con la derrota, aunque creen que «el tiempo acabará de confirmarlo».