En solo 0,7 segundos, Rubén Ontimañas, camarero del bar Bodega Goles de Tarragona, es capaz de comprobar la validez del certificado Covid que los clientes le enseñan para acceder al establecimiento, lo que implica que muy posiblemente tenga un escáner instalado en la retina, según han informado diversos testigos. «Solo con la mirada, es increíble… Es más rápido que un lector QR electrónico», explica a la prensa una de las personas que le ha visto escanear los móviles en tiempo récord y de un vistazo ultrarrápido.
Ontimañas, que claramente ha superado las limitaciones orgánicas y ha inaugurado la era del transhumanismo, no solo debe de tener un lector QR instalado en uno de sus dos ojos, sino también un acceso inmediato a internet configurado en su cerebro, dado que al instante de mirar el código puede comprobar si existe en el repositorio de certificados, revisar sus datos y verificar su autenticidad y caducidad.
«¿Me enseñan el certific…? Gracias, adelante, ya está», suele decir Ontimañas a todos los clientes. A algunos, según los testigos, ni siquiera les da tiempo de sacar el móvil del bolso, lo que podría significar que tiene también visión de rayos X.
El hecho de que no pida el DNI implica que, o bien conoce los rostros de los 47 millones de españoles, o bien tiene instalada una base de datos en su cerebro.
A última hora, los testigos han informado de que el camarero-cyborg no solo tiene un dispositivo electrónico instalado en sus ojos, sino que muy posiblemente todo su organismo esté modificado genéticamente y funcione de forma distinta, pues el hecho de que lleve la nariz por fuera de la mascarilla mientras trabaja indica que no está conectada a sus pulmones.