Buscando entre los ocho volúmenes de la obra fundacional del socialismo, los votantes de PSOE y Unidas Podemos llevan varios días intentando localizar las páginas de El Capital donde indicaba Karl Marx que las lavadoras había que ponerlas de madrugada para reducir los costes de la factura energética, según han informado diversas fuentes cercanas a los votantes de izquierda. «Estoy convencido de que un Gobierno de izquierdas como el nuestro debe tener una razón muy buena para someternos a la dictadura de las eléctricas», explica José Sanchís, que lleva varios días encerrado en casa repasando toda la obra de Marx.
«Son muchas páginas pero estoy seguro de que en algún sitio estará lo de que es aconsejable que el proletariado solo tenga acceso a los medios de producción de madrugada y en fines de semana», dice este marxista convencido.
«Quizá imponiendo al proletariado un uso restringido y con horarios complejos de la fuerza de trabajo se llega a un punto de no retorno y de supeditación al consumo, que es el paso previo a la revolución que conducirá, necesariamente, a la dictadura del proletariado, ¿no? Es eso, seguramente», aventura Sanchís.
Los votantes de izquierdas dicen desconocer todavía «qué factor juega cocinar de madrugada en la revolución» pero están convencidos de que un gobierno socialcomunista como el que tiene ahora mismo España no impone la nueva factura de la luz de forma arbitraria sino que, a buen seguro, «debe de tratarse de un paso difícil y sacrificado pero necesario para llegar a un estado utópico en el que el obrero se libere del yugo burgués».
Los votantes de izquierdas consideran que, aunque en El Capital no haya ninguna mención explícita al uso de «maquinaria eléctrica durante las horas valle», es posible que exista, en alguna de sus casi 3000 páginas, alguna alusión velada al asunto. El hecho de poder leer solo de madrugada porque el resto del día la electricidad es demasiado cara está impidiendo llegar a resultados concluyentes, pero los simpatizantes socialistas confían en que Karl Marx explique, «puede que incluso de forma más pedagógica que el propio Gobierno», en qué beneficia al pueblo llano poner lavadoras de madrugada.
A última hora, y tras no encontrar rastro en El Capital de nada que pueda explicar el nuevo recibo de la luz, los simpatizantes socialistas han empezado a buscar también en «La teoría general» de Keynes, en Reforma y revolución de Rosa Luxemburgo e incluso en El segundo sexo de Simone de Beauvoir, intentando encontrar dónde se indica que es aconsejable planchar por la noche.
