Chicho Cómico Oficial, máximo exponente del monologuismo en Gijón, ha logrado adelgazar casi diez kilos con su nuevo espectáculo de «Stand up and down up and down up and down comedy». El show combina los chistes con las sentadillas e inaugura, según él, «una nueva era» en la que el humor y el ejercicio se combinan «porque la risa es salud, ahora más que nunca».
Chicho explica que su nutricionista, Alberto González Fueyo, le puso un ultimátum. «Le dije que no podía seguir alimentándose de las tapas que le servían en los bares donde actuaba, porque las arterias no le iban a reír muchas más gracias», comenta. «Se acabaron las gracias saturadas», añade Chicho, haciendo gala de su humor.
«Los cómicos en sus carteles siempre salen señalando a cámara con el dedo. Chicho señalaba con una salchicha», comenta el nutricionista. «Me llamaban monogordista», remata el cómico. «Y si me tiraban tomates, pues me los comía», agrega.
Los diez kilos que ha logrado adelgazar este cómico confirman que combinar las rutinas de sus monólogos con las rutinas del gimnasio es el camino a seguir. «Yo ya sé que la gente se ríe porque me ve sufrir en el escenario, pero esa es la base de la comedia que a mí me gusta, la catarsis», sentencia Chicho. «Ojo, que ‘catarsis’ no viene de ‘catar'», aclara.