Reiterando que ha de reunirse “con todo el mundo”, Pedro Sánchez ha mantenido encuentros esta mañana con Pablo Casado, Inés Arrimadas y Papá Noel a fin de buscar apoyos suplementarios a ERC que garanticen su investidura. Si los nacionalistas fallan, el plan del presidente en funciones era pedir la abstención a PP y Ciudadanos y, si estos no dan su brazo a torcer -como así parece-, recurrir a Papá Noel y al espíritu de la Navidad. “Yo ya he escrito mi carta con mis peticiones y mis buenos deseos, ahora hay que ver qué es lo que ocurre”, ha explicado Sánchez tras las reuniones.
El candidato socialista se ha mostrado optimista y ha insistido en que cree que este año se ha portado “bastante bien, dentro de lo que cabe”, pero ha admitido que “nunca se sabe”. Pese a todo confía en el “sentido común y el espíritu de la Navidad” y espera ser investido antes de final de año o a principios del año que viene. “Yo lo que querría es un apoyo duradero de la izquierda de este país, pero si no es así tampoco me importaría despertarme esta mañana de Navidad y encontrarme con un gobierno estable que nos llene a todos de alegría”, ha declarado Sánchez.
“Si tengo que gobernar confiando en que Papá Noel me traiga un gobierno no dormiré por las noches, por los nervios y la ilusión”, ha concluido el político socialista.
Por su parte, Papá Noel ha declarado que “jo, jo, jo” y no ha despejado las dudas sobre su apoyo al PSOE.