Un error fatal de coordinación ha arruinado el rodaje del anuncio de Navidad de Campofrío que debía estrenarse hoy. La insistencia de la marca en grabar en sus instalaciones, pese a que el director, Daniel Sánchez Arévalo, se quejó de que «con los chillidos de los cerdos es imposible concentrarse», ha propiciado que el cómico David Broncano haya acabado en la cadena de producción, triturado y envasado al vacío, mientras que un cerdo de ocho kilos era colocado frente a una cámara para contar un chiste crítico con Podemos.
«No ha sufrido», insistían fuentes de la marca, recalcando que su intención no es «ofender a ningún colectivo, y menos el de los cómicos» y atribuyendo lo ocurrido a un «trágico accidente». Sergio del Portillo, responsable de la campaña, reconocía esta tarde que la insistencia de Campofrío en controlar todo el proceso acabó forzando que las cosas se hicieran «demasiado a su manera».
En un breve comunicado difundido hace unas horas, Campofrío se ha disculpado con los fans de Broncano recordando que «él siempre fue un provocador y esta muerte sin duda le hubiera divertido».
La marca pregunta también si es «demasiado pronto» para vender una serie limitada de lonchas de jamón de «Carne Moderna» con las partes «más sabrosas y más saladas» del cómico fallecido entre estertores «pero siempre sin intención de ofender a nadie».