“Adiós, amigos platos. Adiós, amigas sartenes. Pensaré en vosotras constantemente. Cuando vuelva, no seré la misma”, han dicho millones de ollas y cacerolas de toda Cataluña en las últimas horas para despedirse de otros enseres de cocina al saber que ha llegado su hora, según han informado fuentes cercanas a las cocinas catalanas.
“Nunca dejéis de cocinar ‘carn d’olla’ y habas a la catalana. Recordadme como estoy ahora: sin golpes ni abolladuras”, han declarado las cacerolas. “No lloréis por mí, recordadme sonriendo”, han solicitado.
Al cierre de la edición, una mano ha abierto la puerta del armario.