El carril bici
«Me encanta venir a pasear con mi señora, lástima que haya tanto ciclista molestando»
★★★★
Recomiendo a todo el mundo venir aquí a pasear de la mano ocupando ambos carriles. Resulta muy cómodo que hagan estos pequeños paseos para los enamorados, dado que las aceras son algo estrechas para nosotros y tampoco es plan de ir por la carretera. Lo peor son los ciclistas, que no respetan nuestro amor y se empeñan en increpar y tocar el timbre.
TERE RIPOLL
El infierno
«Un horror»
★
Vine aquí persiguiendo a mi novia Beatriz, que tiene la mala costumbre de morirse y dejarme a mí con la palabra en la boca. Me recibió un tipo muy majo que me hizo de guía pero estuvimos caminando en círculos cada vez más pequeños y conociendo a indeseables de la peor calaña: envidiosos, lujuriosos, ladrones, gandules… Espero no volver jamás. Beatriz además estaba en otro sitio.
DANTE ALIGHIERI
La oreja
«Bzzzz me encanta volar por aquí a altas horas de la nochebzzzzz»
★★★
Bzzz siempre que puedo, aprovecho un momento de mi corta vida para venir por las noches a la oreja. Hay muy buen ambiente y es el sitio por el que más me gusta merodear antes de salir a cenar y a acribillar el resto del cuerpo.
UN MOSQUITO
Paddle Surf
«Es imposible tomarse el té sobre la tabla»
★★
Acudí a practicar este sport con mi mayordomo, George. Todo fue bien hasta las cinco, la hora del té. En ese momento le pedí a George que dispusiera las tazas en la zona este de la tabla: no había sitio para el mantel, las galletas se cayeron el agua, el vaivén del mar lo tiraba todo. ¡Qué embarazo cuando vinieron a mi tabla, tal y como habíamos quedado, la viuda Mapplethorpe, Míster Huxley y el reverendo John! No había tazas para todos y acabamos mojados. No pienso repetir esta actividad tan necia, al menos no a la hora del té. No pienso volver a practicar esta estúpida actividad hasta que no habiliten tablas de surf más grandes, con establos, jardín y pérgolas.
SR. ALFONSO PÍJEZ SABEMÚCHEZ
Mercat del Ninot
«Imposible la comida del snack: venden la fruta entera y no en bandejas o zumos»
★
(Traducción automática) Tenía hambre así que pensé naturalmente en meterme en los sitios de comer de España: los mercados municipales. Yo por ahora solo he presentado la Boquería pero pensé que los demás también serían buenos igualmente. No es así. Estuve en el Mercado del Muñeco y había sandías enormes que no caben en la boca. No había zumos. Pensé: un poco de pescado. ¡Está todo crudo y con las alas para nadar! Prefiero los mercados más tradicionales donde solo vendan zumos, pizza y beer en lata.
BRENDA WALSH
El Mundo Today publica cada viernes en la revista OnBarcelona de El Periódico una selección de las reseñas que la capital catalana recibe en internet.