“¿Está la COPE de su gusto o la quiere más alta? ¿Le molesta el humo, cambio el cigarro de mano? ¿Quiere un trago de pimple usted también?”. Con estas preguntas recibirán a partir de ahora los taxistas a sus pasajeros a fin de hacer frente a Cabify y otros servicios de transporte con conductor. “Hasta ahora los clientes se quedaban en silencio cuando veían al taxista disfrutar de su petaca, pero a partir de ahora la compartirán como camaradas, como viejos amigos, como viejos compañeros de trinchera”, explica un portavoz del gremio de taxistas.
Los taxistas también han adelantado que, a partir de ahora, llevarán a muchos pasajeros al rompeolas o a la vieja estación de trenes, donde podrán pasarse la petaca el uno al otro hasta abrir sus respectivas almas explicándose su pasado. “Y luego dispararemos a las ratas con la pistola que llevamos en la guantera”, detalla un conductor.
“No es la ruta que me has pedido pero es la ruta que deseas…”. Esa será la frase que dirán los taxistas a los clientes que se quejen de un cambio de ruta, según han explicado en una nota de prensa, donde también adelantan que, cuando vean que un hombre de negocios está muy estresado, le llevarán al campo y conducirán “lo que haga falta, hasta llegar allí donde nadie pueda conocernos y podamos empezar una nueva vida, juntos”.