Hay veces que sientes la necesidad imperiosa de compartir algo importante. En esos momentos es muy importante seleccionar muy bien el destinatario de tus mensajes. Aquí tienes algunas indicaciones:
Un embarazo: a Mark Zuckerberg, aunque él ya lo sabe porque el algoritmo dedujo hace algunos años el momento exacto en el que pensabas tener un hijo.
Un cambio de trabajo: a Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda.
Un aumento de sueldo: a los compañeros de trabajo que cobran menos que tú.
Que ya has terminado tu novela: a tu editor, el empleado de la copistería.
Una nueva orientación política: a Twitter.
Que te has hecho vegano: absolutamente a todo el mundo.
Que has completado tu primera maratón: absolutamente a todo el mundo.
Que has sido capaz de terminarte una tarrina de helado a solas y en solo media hora: absolutamente a nadie.
O bien, además de todas estas personas, puedes compartir esas noticias con tus mejores amigos.
Patrocinado por Fripozo.