La aplastante victoria de Vladímir Putin en las elecciones presidenciales celebradas en Rusia podría quedar en entredicho debido a la alerta de una posible injerencia rusa por parte de los observadores internacionales.
Los encargados de impedir cualquier irregularidad en el plebiscito creen que desde Rusia se ha tratado de influenciar a la opinión pública rusa mediante mítines políticos y debates en televisión. “Hemos notado que Rusia tenía mucho interés en estas elecciones”, informan. “Muchos políticos rusos han estado trabajando para influir en el resultado de las votaciones”, lamentan.
Los observadores internacionales también denuncian que la mayoría de los votantes fuera de nacionalidad rusa. “Todos los candidatos también eran rusos, y los presidentes de mesa eran rusos, incluso el programa de recuento de votos era ruso, las elecciones tenían una peligrosa presencia rusa en todo momento que podría hacer que no fueran del todo limpias”, han declarado nada más conocerse la reelección de Putin hasta 2024 con el 76% de los votos.
Desde fuera de Rusia preocupa que la proliferación de «fake news», como una noticia que se hizo viral en la que se aseguraba que Vladímir Putin tenía muchas opciones de ser reelegido, interfiriera en el voto del electorado ruso. La ONU ya se ha pronunciado sobre el tema asegurando que no tolerará ni una sola injerencia más que no sea estadounidense en ninguna elección presidencial del mundo.