Olvídate de alarmas y de puertas blindadas: Aprender a burlarlas es el preescolar de los ladrones. Si deseas proteger tu vivienda de la codicia ajena, aquí recopilamos los sistemas antirrobo más eficaces para ti.
Orina en los rodapiés del recibidor para que los intrusos sepan que ese lugar te pertenece. También puede disuadirles el olor a coliflor hervida.
Guarda los dispositivos de «abrefácil» de tetrabricks y envases e instálalos en cerraduras de puertas y ventanas.
Compra un avestruz. La mascota ideal para proteger tu propiedad privada. Mucho más territoriales que los perros y considerablemente más hurañas que los gatos. Además, según el 95% de los delincuentes comunes, «te preguntas por qué coño ha elegido el tío un avestruz y te entra un mal rollo que flipas».
Hazles creer que estás siempre en casa. Los ladrones espían tus hábitos para averiguar cuándo encontrar tu morada vacía. Cuando salgas de viaje cuelga selfies hechos previamente en el baño, déjate abierto el grifo de la ducha y llena el buzón de ácido para que la correspondencia se disuelva en vez de acumularse en tu ausencia.
Coloca en la puerta un cartel con las palabras «MICROTEATRO POR DINERO. ENTRADAS EN ATRÁPALO». Eso disuadirá a los ladrones más sensatos.
También puede ser efectivo un letrero de ENTRADA POR LA OTRA PUERTA, señalando la del vecino que peor te caiga.
Instala a «María Luisa la del segundo». Las cámaras de vigilancia obtienen imágenes borrosas que rara vez sirven para identificar al criminal. María Luisa, por el contrario, jamás olvida una cara y está programada para cruzar datos con las demás clientas de la peluquería. En menos de 24 horas conocerá las intimidades de cualquier delincuente con una precisión escalofriante.
Desconfía del colectivo LGTA. Se suele designar con estas siglas a la terna del mal: Luz, Gas, Teléfono y Agua. Se trata de redes de extorsión dirigidas por agrupaciones organizadas que campan a sus anchas gracias a la complicidad del Gobierno. El mejor método para que no te roben en exceso es no hacer tratos con ellas.