Un padre de familia ha aparecido esta mañana en la aplicación de citas Tinder, tan sólo tres meses después de divorciarse. Los responsables del hallazgo han sido sus dos hijos, Juana y Román, de 23 y 31 años respectivamente. Tras comprobar la autenticidad de la ficha, que muestra una fotografía del padre tomada durante unas vacaciones familiares en Grecia, los hijos han convocado una reunión de urgencia para afrontar la situación.
«¿Cómo le han dejado darse de alta? ¿No ven que es un padre?», pregunta la hija estupefacta. Considera «traumático» que la aplicación permita la presencia de padres que pueden cruzarse con amigos de sus hijos y generar situaciones incómodas. «Los padres que vayan a bares o sitios así, Tinder es nuestro terreno», protesta Román.
La compañía reconoce que no existe ningún filtro que vete a padres de familia y considera que éstos seleccionarán perfiles afines a ellos. «Sí, claro, me están diciendo que papá no le dará al ‘like’ cuando vea fotos de amigas mías porque los hombres de su edad no se fijan en veinteañeras», replica Juana.
La esperanza de los hijos es que su padre se haya descargado la aplicación sin saber lo que es. «Ven un logo que les suena y se la bajan, son como los mosquitos con las bombillas. Luego tienen el escritorio lleno de iconos que no saben para qué sirven», argumenta Román. Su hermana, sin embargo, es menos optimista: «Está buscando pareja claramente y no me extrañaría que estuviera en el puto Badoo también», apunta.
Las peores sospechas de la familia se han confirmado hace unas horas, cuando Román ha recibido un mensaje de WhatsApp de su padre en el que éste le pregunta «Qué significa ‘send nudes’, tú que sabes inglés».