El máximo accionista de Inditex, el gallego Amancio Ortega, ha consolidado su primer puesto en la lista de los más ricos del mundo porque nadie acepta su dinero. «No aceptan sus donaciones a la Sanidad pública, no aceptan que pague nada, nadie quiere su dinero», reconocían fuentes de su entorno, que aseguran que el empresario vive la situación como un calvario. «¿Mi dinero no vale aquí o qué pasa?», se pregunta Ortega.
“Tengo más de lo que puedo gastar, pero todo el mundo parece empeñado en que me lo quede”, se queja el dueño de Inditex. “Pagaría lo que fuese para que la gente quisiera mi dinero”, se ha sincerado esta mañana con los ojos vidriosos.
Tal es su frustración que Amancio Ortega ha empezado a meter billetes en los bolsillos de la ropa de Zara porque es la única forma de hacer donaciones que ha encontrado. El hombre más rico del mundo también ha escrito el número secreto de su tarjeta en el cajero de debajo de su casa con la esperanza de que alguien pueda servirse directamente de su cuenta bancaria. De momento no ha habido suerte.
Tras haberlo valorado con su junta de accionistas, el empresario gallego ha descartado subir el sueldo a sus empleados por miedo a que estos también lo rechacen. “Seguiré pagándoles lo mismo porque no quiero que se enfaden”, ha reconocido.