«Restaurante emblemático, buena comida, mucho viejo verde». Así describe la actriz estadounidense Christina Hendricks el emblemático restaurante madrileño Casa Lucio, donde coincidió con el escritor Arturo Pérez-Reverte y varios de sus colegas, que la observaban desde otra mesa.
Hendricks ha recurrido al célebre portal TripAdvisor para contar su experiencia en el establecimiento y asegura que «mi marido tuvo que ponerse violento y echar a patadas a unos señores borrachos y acosadores; yo también los empujé hasta la calle, uno bajito con los morros gordos lloró y se le rompieron las gafas».
La intérprete norteamericana insiste en su reseña en que la gente de Madrid es «acogedora y educada, salvo estos señores alcohólicos que no dejaron de insinuarse hasta que los asustamos». Ensalza las virtudes de los callos a la madrileña y el jarrete de ternera y agradece el detalle del encargado, que no quiso cobrar a la actriz por las molestias ocasionadas por «esos energúmenos dementes».
El texto termina relatando la escena en la que la actriz de Mad Men se apiada «del borracho más alto, el más avergonzado de todos» y se digna a firmarle un autógrafo en una servilleta de papel. «Luego se quedó mirándome el escote y mi esposo tuvo que ponerlo en su sitio de nuevo, pero esta vez ya sólo tuvo que levantar la mano porque el anciano se alejó dando tumbos, muy asustado», explica Hendricks.
«Volveré, a diferencia de esos borrachos, que aprendieron la lección», concluye.