Antonio Alcántara tuvo una cuenta «offshore» en la isla de Niue, en el Pacífico Sur, entre noviembre de 1998 y julio de 2000, y utilizó al actor Imanol Arias como testaferro. Ésta es la versión que ha ofrecido hoy el propio actor, que asegura ser víctima del personaje de «Cuéntame cómo pasó» e insiste en que él se limitaba a hacer lo que le indicaban sus guionistas.
Según el testimonio de Arias, Antonio Alcántara se convertía en un evasor fiscal en la serie y, para despistar a la Agencia Tributaria de «Cuéntame…», emplazaba «por exigencias del guión» a Imanol Arias a constituir la sociedad Trekel Trading Limited en el mundo real. El actor nunca sospechó que esta maniobra «de la ficción» acabaría afectándole directamente.
«El único error que cometí fue meterme en el papel de Antonio Alcántara y seguir el guión de la serie», reitera Arias, aclarando que es al señor Alcántara a quien hay que exigir responsabilidades.
«Me siento traicionado por la deriva que ha tomado mi personaje», lamenta el actor, que protesta porque ahora Televisión Española ha decidido cancelar la serie «incluyendo los capítulos en los que se ve a Antonio blanqueando fondos y, por tanto, queda claro que era él y no yo el defraudador».
La actriz Ana Duato, involucrada también en el asunto, ha presentado dos querellas contra Mercedes Fernández López, una ante los tribunales de la serie de ficción y otra ante la justicia de la España actual.
Si las explicaciones de los dos actores convencen a los jueces, ambos podrían acabar interpretando a sus personajes encerrados en cárceles del franquismo.