La aerolínea Iberia ha presentado esta mañana una queja formal ante la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) tras descubrir un avión Boeing 737-800 de Ryanair escondido en la bodega de una de sus aeronaves, que cubría el trayecto Londres-Madrid.
El avión de Ryanair ha aparecido dando vueltas en la cinta de recogida de equipajes del vuelo IB3163 de Iberia con la etiqueta «Frágil» en el morro. Allí se encontraba el consejero delegado de la compañía de bajo coste irlandesa, Michael O’Leary, junto a varios empleados suyos dispuestos a desembarcar a los pasajeros y colocar la aeronave en un carrito del aeropuerto.
«Nos pareció raro que todas las ventanillas del avión dieran a un interior, pero claro, conociendo la compañía pensamos que las ventanillas con vistas llevarían asociado algún suplemento», explica uno de los pasajeros de este avión que viajaba de polizón para ahorrar combustible. «Me jode porque tengo la tarjeta Iberia Plus pero no me vale para este viaje ya que, sobre el papel, he viajado con Ryanair», añade.
Ryanair ha respondido a las protestas de Iberia con una escueta nota en la que asegura que pagó 20 euros por exceso de peso, adjuntando además una fotocopia en blanco y negro del billete de Iberia con el que viajaba su aeronave.
«Nos obligaron a facturarlo porque no cabía en los compartimentos superiores y encima ahora se quejan de que viajaba en la bodega. Los que tendríamos que protestar somos nosotros porque el avión ha llegado a Madrid con un golpe en el lateral izquierdo», ha declarado O’Leary.
La compañía ya fue multada hace seis meses por robar 17 pasajeros de Lufthansa aprovechando que la aerolínea alemana había dejado las puertas de uno de sus aviones sin el seguro puesto.