La cadena de tiendas de ropa H&M ha hecho ya su balance anual certificando que sus ingresos han crecido un 17%, hasta 9.421 millones, el «ebitda» un 22%, hasta 1.970 millones, y el beneficio neto un 26%, hasta 1.166 millones. Parte de estos grandes resultados se debe al éxito apabullante de su prenda más vendida en 2015: una camiseta con lemas anticapitalistas.
«El capitalismo es una forma de terrorismo», «Still Hate Tatcher», «Capitalismo = Explotación» o «Capitalism Isn’t Working» son algunos de los eslóganes que han triunfado entre los clientes de la multinacional, que han llenado sus armarios de fervor anticapitalista estampado en camisetas de algodón fabricadas en Camboya.
El modelo con la cita de Bakunin «La uniformidad es la muerte; la diversidad es la vida», disponible en un único color y en una sola talla, se sitúa en el segundo lugar en la lista de las prendas más vendidas en Europa, contribuyendo al aumento del margen bruto de la compañía, que ha mejorado 50 puntos básicos hasta el 58,1%.
De cara a 2016, los accionistas de la empresa esperan que su ejército de becarios anarquistas se disponga a recopilar muchas más frases contra el sistema establecido y la explotación laboral con el fin de seguir aumentando los ingresos. «Nuestro objetivo es aumentar el ritmo de crecimiento un 15% más, para lo que necesitaremos muchas más sentencias contra las grandes empresas», explican.
«La lucha contra el capital y la crítica a la alienación social son nuestra prioridad y la base de la confianza de nuestros clientes, que se mueren por ser los primeros en difundir nuestros ataques demoledores al consumismo irreflexivo», confirmaba esta mañana un portavoz de la compañía.
