Es el vecino el que elige el alcalde y es el alcalde el que quiere que sean los vecinos el alcalde.
Así lo estableció ayer el Congreso de los Diputados con los únicos votos a favor del Partido Popular, que presentó la proposición de ley urgente la semana pasada a raíz de unas declaraciones del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Aunque la oposición en bloque se abstuvo en la votación asegurando no entender, sí apoyó unánimemente que «después del año catorce vendrá el año quince» y que «un vaso es un vaso y un plato es un plato», al considerar que la propuesta del grupo popular tenía «una lógica aplastante».
«El partido del Gobierno está aprovechando el fin de la legislatura para forzar la aprobación, deprisa y corriendo, de todas las iniciativas que parten de la presidencia», denunciaba ayer Cayo Lara, portavoz del grupo parlamentario de La Izquierda Plural, a la salida del pleno.
En la misma sesión parlamentaria, las Cortes aprobaron también que los españoles son muy españoles y mucho españoles.