Tras anunciar esta semana que deja la política para recuperar su plaza de profesor en la facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Complutense de Madrid, Alfredo Pérez Rubalcaba ha visitado esta mañana las clases en las que trabajó hace 32 años para saludar a viejos amigos y ponerse al día.
A media mañana, el todavía líder del PSOE ha llamado al despacho del jefe de estudios para presentarse y le ha recibido un señor idéntico al presidente Mariano Rajoy.
«Aquí aplicamos mi programa docente le guste a usted o no», ha asegurado el jefe de estudios
«Espero que haya leído mi programa de estudios y que le parezca bien, porque es el que vamos a aplicar», ha dicho el jefe de estudios justo antes de que Rubalcaba, muy pálido y totalmente bloqueado, se haya excusado para ir al baño, donde se ha encerrado durante más de media hora.
Los profesores que trabajan codo con codo con el jefe de estudios niegan el parecido que Rubalcaba insiste en señalar. «Tiene barba blanca, eso es todo. Creo que el señor Rubalcaba ha salido un poco trastornado de la política y ve fantasmas donde no los hay», asegura un catedrático de Química Orgánica.
«Estaba como ido. Sudando como un cerdo y muy nervioso, me ha preguntado qué coño hago aquí. Le he explicado que soy alumno de segundo curso y que me llamo Juan, pero él ha insistido en decir que soy Eduardo Madina y que no sabe a qué estoy jugando», confiesa uno de los muchos jóvenes a los que Rubalcaba ha confundido con miembros de su partido.
A última hora de la mañana, se ha podido ver a Rubalcaba deambulando desorientado por el campus y tirándole piedras a un bulldog francés a quien, al parecer, ha confundido con Francisco Álvarez-Cascos.
