La valla de Melilla ha vivido este jueves un intento masivo de entrada de inmigrantes que querían ver de primera mano la ceremonia de proclamación de Felipe VI.
Vestidos con sus mejores galas y agitando banderas de España, más de 400 subsaharianos se han aproximado a la frontera que separa la ciudad autónoma de Marruecos, donde han sido interceptados por las fuerzas auxiliares marroquíes.
Todos pedían autógrafos de Su Majestad
Solo algunos afortunados han logrado encaramarse a la valla y, de ellos, únicamente doce han podido saltar al otro lado con los trajes rasgados y alguna que otra magulladura.
El salto de hoy no ha pillado por sorpresa a la Guardia Civil, que es consciente de la atención que despierta la proclamación del nuevo Rey de España.
«Les hemos repartido fotos firmadas de Felipe VI por cortesía y luego les hemos acompañado a la salida. Esto es una ceremonia familiar, solo para los españoles», explicaba uno de los agentes.
Según ha informado la Delegación del Gobierno en Melilla, el Instituto Armado está habilitando en estos momentos una pantalla gigante que retransmitirá en directo la proclamación. La idea es que los subsaharianos desistan de intentar saltar la valla y se queden a verla por televisión desde su país.
«A través de las rejas se ve bastante bien. Tendrán queja, joder», insistía el agente de la Guardia Civil.