Barcelona acoge desde hoy el Mobile World Congress, el mayor evento de expertos y periodistas de la industria de la telefonía móvil de todo el mundo. Y ha arrancado esta mañana con una de las marcas históricas: Nokia. La firma finlandesa ha anunciado esta mañana que se pasa al sector de los interfonos. «En Nokia dejamos atrás los teléfonos, sector copado por otras marcas y que parece que ha tocado techo, para centrarnos en un ámbito algo descuidado de la comunicación: los telefonillos», ha dicho Stephan Elop, director de la marca, durante la presentación.
Se acabó lo de comunicarse a gritos en el portal
Disponible en dos colores, aluminio y cobre, la firma ha presentado el nuevo «Nokia Who». Se trata de un terminal que permite una comunicación «inmediata y en tiempo real» entre los residentes de un piso y los visitantes ocasionales que puedan llegar al edificio. Éstos tendrán que pulsar un único botón para abrir un eficiente canal comunicativo con el piso al que se dirigen, cuyos habitantes podrán interrogar a las visitas sin exponerse a ellas físicamente.
«Durante siglos, no ha habido mayor distancia entre dos personas que la que imponen varios pisos de escaleras. Desde Nokia, nos hemos planteado superar ese escollo como principal objetivo. Ya basta de salir a la ventana para ver quién quiere entrar en casa. Podremos hablar con quien sea sin salir de casa, simplemente descolgando el dispositivo comunicador», ha explicado Elop. El terminal es compatible con cualquier tipo de edificio de hasta ocho plantas (la marca todavía no ha experimentado con edificios más altos) y se compone de dos elementos: un teclado que se instala en la portería y un «terminal receptor» que estaría situado en cada uno de los apartamentos que componen el inmueble.
Se trata de un portero automático con todas las funciones de un interfono avanzado: el modelo «premium» dispone también de una cámara de 0,5 megapíxeles desde la que es posible ver a la persona con la que nos comunicamos. «Es asombroso: desde nuestra propia casa podemos ver, en tiempo real y sin necesidad de revelado, quién está llamando a nuestro timbre», explicaba el jefe de Nokia, que se ha animado, incluso, a hacer una demostración en vivo pidiendo a uno de los periodistas de la sala que saliera al exterior y que utilizara el interfono instalado para la ocasión.
Sin embargo, la estrella de la presentación de este año llegó al final. Es el «Nokia Manuel», un dispositivo de comunicación con todos los lujos de los que es capaz de hacer alarde la firma. Súper sensible al tacto, con diseño clásico y construido en una sola pieza, se trata de un carismático portero de carne y hueso «que no solo se preocupa de seleccionar por ti quién puede entrar en tu edificio sino que, a las siete de la tarde, pasa por todos los pisos para recoger la basura». Nokia ha reconocido que «si hay algo que nos molesta de la comunicación, es tener que comunicarnos. Manuel impide que tengamos que hacerlo porque es muy desconfiado y solo dejará pasar al edificio a la gente que él considere oportuna, sin preguntarnos si conocemos o no a esa persona».
No se ha especificado, sin embargo, si el «Nokia Manuel» funciona sobre Windows Mobile o no, aunque se ha hecho hincapié en su «memoria fotográfica para todo aquel que entra o sale, así como para acumular datos de todos los vecinos, de modo que sea muy fácil consultarlos en cualquier momento».
