Los habitantes de Ainet de Besan (Lleida) vivieron ayer una jornada de conmoción y espanto al recibir la visita inesperada de varios miembros del Ejército y de la Policía Nacional, que llevaron a cabo una operación conjunta para localizar y detener a Joanet «Lo Pelat» y Amadeu Riera, dos agricultores a quienes se acusa de cultivar androides. «No hacían nada malo. Compraron las semillas en una empresa americana de Internet pero no querían hacer daño a nadie, sólo querían usarlos para fabricar mermelada» explica Carmeta Boloix, esposa de Riera. Los detenidos colgaron fotografías en una página web explicando el proceso de elaboración de la mermelada en cadena mediante el uso de androides y las autoridades hicieron saltar la alarma. «Nadie usa a los androides para la artesanía de pueblo. Tarde o temprano hubieran tenido otras ambiciones. Es como tener una metralleta y usarla para cascar nueces. No podemos confiar ciegamente en nadie que posea una granja de androides» argumenta uno de los agentes policiales. Los habitantes de Ainet de Besan, sin embargo, defienden sin tapujos la inocencia y las buenas intenciones de los payeses.
«En el fondo esto pasa porque somos de pueblo. Creen que no sabemos dominar la tecnología. Y se equivocan completamente. Un androide no es tan distinto de una vaca. Me gustaría ver a un señor de esos de Google pasturando una vaca, a ver cómo se las apañaba. Una vaca tiene una fuerza descomunal y si te arrincona te aplasta vivo. Un androide se pone tonto y con un ‘cop de garrot’ (golpe de garrote) y un ‘passa a jeure me cago en Cristo amb pèl’ (se sienten, coño) lo pones en su sitio inmediatamente», explica Boloix.
De momento, Joanet «Lo Pelat» y Amadeu Riera deberán responder a un sinfín de preguntas y requerirán, sin duda alguna, la ayuda de un abogado experto en delitos tecnológicos. Lo androides de Ainet, por su parte, serán trasladados a un laboratorio del CSIC para comprobar que, efectivamente, sólo están programados para fabricar mermelada artesanal en cadena.