La actitud completamente anómala de Francisco Torrent pilló desprevenidos a los funcionarios, que enseguida temieron lo peor. «Lo cierto es que vino la semana pasada a avisar de que vendría hoy, pero no le creímos, cada año decía lo mismo y al final siempre venía con todo el mundo. Es lo mejor, porque aunque siempre hay colas y tensiones, en un solo día terminamos y no tenemos que estar con el temita durante un mes y pico. Pero algo ha pasado esta vez. Algo le ha ocurrido a este buen hombre porque quiere sacarse el tema de encima con una rapidez exagerada. Es como si alguien le estuviera presionando. Puede que esté metido en algo feo» dice Patricia Queralt, que atendió a Torrent.
La Agencia Tributaria ha confirmado a El Mundo Today que la declaración de Torrent será aceptada, puesto que legalmente el plazo se abrió ayer. No obstante, se insiste en que su «nerviosismo» puede deberse a alguna irregularidad, por lo que «será revisada con sumo cuidado». Al fin y al cabo, hasta el día 30 de junio será la única declaración del país, por lo que es de suponer que habrá tiempo para examinarla.