“Felicidades, doña Elena María Isabel Dominica de Silos de Borbón y Grecia, ha sido usted premiada con un magnífico y soleado apartamento en la localidad alicantina de Torrevieja”. Con estas palabras fue informada la infanta Elena por vía telefónica de que había sido la única afortunada en un sorteo realizado ante notario por una empresa de la que la Casa Real no ha querido dar detalles. “Estoy muy contenta, hoy mismo iré a verlo” ha declarado ilusionada y aún sorprendida Su Alteza Real.
Torrevieja, que cuenta con veinte kilómetros de costa soleada y numerosos cantantes de habaneras, proporcionará a la infanta Elena la calma y el optimismo necesarios para afrontar la separación, aún reciente, de don Jaime de Marichalar. Esta es, al menos, la opinión mayoritaria de los periodistas del corazón, que intentan gestionar a la desesperada una visita en exclusiva al nuevo apartamento. Aunque ni siquiera Su Alteza Real ha podido desplazarse aún a Torrevieja para ver el piso, se dice que ya ha adquirido algunos muebles e incluso un velero bergantín con el que podrá recorrer las calmadas olas de la costa alicantina.