La crítica especializada, a pesar del alto prejuicio que tenía en un principio, se ha volcado ante la obra de Pastis y Buenri, tildándoles incluso de «grandes genios españoles del jazz» y resaltando «su maravillosa búsqueda hacia la imperfección». El disco, compuesto por seis pistas de más de diez minutos de duración, fue grabado en su mayor parte en la discoteca Chocolate. «Necesitábamos un lugar en el que nos sintiéramos cómodos. Simplemente llenamos la pista de instrumentos y nos pusimos a tocar. En unas semanas ya teníamos más de 50 temas», comenta un eufórico Buenri.
Los seguidores de Pastis y Buenri están encantados con el giro estilístico del dúo y la mayoría de discotecas de la costa levantina ya ha programado varias «Jam Sessions» para este verano. Sin duda, el jazz se ha convertido en la nueva moda del mundo nocturno gracias a esta pareja de DJ’s que siempre ha conseguido entender los ideales de su generación. Una renovación que muchos compararían con Bob Dylan. «No sabemos quién es ese tío, pero puede que compremos uno de sus discos. Sí, nos gustaría ser los Bob Dylan de nuestra generación» comentan Pastis y Buenri.
Una de sus sesiones en la discoteca «Chocolate» ya ha sido difundida con éxito en Youtube: