Ante la preocupación por los posibles pactos del Partido Popular con Vox, esta mañana Alberto Núñez Feijóo ha querido hacer un llamamiento a la calma y ha asegurado que, cuando llegue a la vicepresidencia, atará corto a Santiago Abascal. «Sé perfectamente que es una persona radical y nostálgica de la España más negra, pero siendo su hombre de confianza y su socio podré influir en su toma de decisiones e ir moderando su tendencia al extremismo», ha tranquilizado el líder de los populares.
«Con esta gente hay que tener cuidado y yo soy el primero que lo sabe y por eso no hay que preocuparse, un presidente debe rendir cuentas ante sus socios y me encargaré de que lo haga», ha añadido.
Feijóo, que no duda al describirse como «el próximo vicepresidente de este país», se ha apresurado a desvincularse de la futura aprobación de la Ley de vagos y maleantes. «No representa la línea de mi partido, pero en un gobierno de coalición hay que ceder para ganar otras batallas», se ha defendido. El líder de la oposición también ha negado que tenga nada que ver con la futura prohibición del Orgullo LGTBI. «Esas son decisiones que se toman desde la presidencia», ha subrayado.
Para acabar de tranquilizar a sus votantes, Feijóo ha prometido que atará tan corto a Abascal que exigirá vivir con él en el Palacio de La Moncloa. «Si estoy siempre con él, no podrá desmadrarse demasiado», ha razonado.
