La broma del año: la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha confirmado esta mañana que, tras dos años de excentricidades, toda su política no era más que una inocentada preparada para este 28 de diciembre. «Pues claro que hay test de antígenos gratis en las farmacias, tontorroneeees», ha declarado esta mañana, animando a todos los madrileños a acercarse a sus centros de salud para hacerse todas las pruebas PCR que necesiten.
«Porque… atención… ¡De repente, hay médicoooos! Los teníamos guardados», ha dicho desvelando la broma.
«Os lo creéis todo: ¿pero cómo no iba a estar preocupada por la sexta ola? Lo estoy y muchísimo, lo que pasa es que también es importante gastarse bromas para mantener alta la moral», ha argumentado la política. Reconoce que le costó convencer a los cientos de facultativos de que se unieran a la inocentada, pero que estos finalmente entendieron lo importante que es el humor, «especialmente en estos momentos».
«Hubo un momento en el que casi se me escapa que los médicos que habíamos contratado estaban escondidos, así que tuve que decir lo de que el colapso era culpa suya… Nos costó a todos aguantarnos la risa», ha explicado la presidenta del PP madrileño. Según ha aclarado, sus rifirrafes con Pablo Casado también son parte del plan para fingir un comportamiento errático.
«¿Y todos los ancianos que murieron en las residencias porque se dio la orden de no trasladarlos? ¡Estaban aquí! Jajajaja. Sí, la abuela Puri tambiéeeen, y el abuelo Nicolás, y la señora Engraciaaa», ha desvelado Ayuso, dando paso a un montón de ancianos que llevan dos años escondidos y fingiendo haber fallecido porque la CAM no permitió su traslado a los hospitales.
La broma preparada por el alcalde del Ayuntamiento de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, consistente en nombrar a Almudena Grandes Hija Predilecta de Madrid para luego decir que «era una coñita», aunque ha sido muy aplaudida no ha estado a la altura de la de la presidenta.
