A fin de ayudar al Gobierno y a las compañías eléctricas a encontrar fuentes de energía alternativas que permitan abaratar el coste de la luz, los españoles están dispuestos a salir a la calle a quemar contenedores «para comprobar si su combustión puede generar energía o no», según ha podido saber la prensa. «Todo sea por la ciencia y, hasta que no lo probemos, no sabremos si quemar contenedores puede generar o no energía», han dicho los ciudadanos.
Los españoles han concluido que no pueden quedarse de brazos cruzados «dejando que el Ejecutivo y las grandes compañías lo hagan todo», conscientes de que toca arrimar el hombro y buscar soluciones. «Creemos que la combustión de todo lo que encontremos en la calle puede generar calor, luz y energía… quizá de forma algo primitiva, pero toda ayuda es poca», dicen.
El plan es experimentar primero con los contenedores, luego con el mobiliario urbano, con las tiendas de multinacionales y finalmente con las sucursales bancarias siguiendo el más estricto método científico de ensayo y error. «Hay muchas cosas que se pueden quemar… iremos viendo», dicen los españoles, que se muestran optimistas ante su nueva etapa como ingenieros energéticos.
«Quizá, conforme avance la investigación, el mercado energético se acabe regulando, ya veremos», dicen.
A última hora, la prensa ha podido saber que muchos ciudadanos ya se han comprado batas blancas y han bajado a la calle con una libreta en la que apuntar los resultados, unos cables, unas turbinas y mecheros.