Los hechos se produjeron el pasado jueves, cuando Pablo R. G., tras enviar varios mensajes en Whatsapp, se decidió a realizar una llamada para hablar: “Ni lo pensé, solo pulsé el botón de llamada y luego todo fue muy rápido”, declaró Pablo R. G.
Su interlocutor dio por hecho que se trataba de un error y no contestó al teléfono: “Que me has llamado jajaja” escribió, a lo que Pablo R. G. respondió llamando de nuevo y dejando claro que era una llamada voluntaria.
Nadie en el entorno de Pablo R. G. se explica por qué su amigo tomó una decisión tan drástica cuando hasta ahora se había comportado con total normalidad: “Llevamos más de cinco años solo de ‘wasaps’ y reconozco que no estaba preparado para esto”, confesó el damnificado a los agentes que investigan el caso, tras ser atendido por un equipo de emergencias.
Según informaba la Brigada Central de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional a este medio, por el momento no se han localizado más llamadas de Whatsapp voluntarias y los mensajes de audio y de texto continúan con normalidad. “No existen motivos de alarma”, tranquilizaba el portavoz de la Policía Nacional en rueda de prensa esta mañana, y añadía que “no es el momento de hacerse el héroe”, apelando a la responsabilidad ciudadana para que sigan evitándose las llamadas de teléfono entre allegados y todo transcurra como hasta ahora.
