María Muguerza, natural de Nigrán (Pontevedra), ha logrado desparejar a su hijo y a su novia metiéndolos en la lavadora. Los hechos se produjeron el pasado sábado por la tarde, cuando la mujer introdujo a los dos jóvenes en el electrodoméstico después de muchos años sin aprobar la relación.
Según ha podido saber la prensa, la señora utilizó un programa especial y, a la hora y media, su hijo y su novia no se soportaban y la pareja se había roto por completo. “Incluso tuvieron que secarse por separado porque ya no se podían ni ver”, declara la mujer, orgullosa de su hazaña. “Había probado de todo pero tenían un vínculo muy fuerte, por suerte no hay nada que se resista a un buen centrifugado”, expresa.
Temiendo una reacción negativa por parte de su hijo, que llevaba diez años de relación y estaba muy enamorado de su novia, Muguerza ha aprovechado para añadir suavizante con la idea de que el hijo sea menos respondón. “También eché lejía para evitar que diga palabrotas, es un chaval con muy mal pronto”, se sincera la madre.
Si la mujer ve que su hijo y su novia lo pasan muy mal estando separados, no descarta meterlos en el cajón de los cables para que se vuelvan a liar.
