Presentándolo como la máxima innovación en dispositivos móviles, Apple ha anunciado esta misma semana un nuevo modelo de iPhone que es, indudablemente, el más compacto de la historia y,, para conseguirlo solo se han tenido que eliminar todas, absolutamente todas las funcionalidades “excepto ser de Apple”. “¿Qué es lo que hace que un producto Apple sea un producto Apple? No es el teclado o la pantalla, no es que sirva para algo, es que sea Apple. Esa es la esencia de Apple”, explicó el CEO de Apple, Tim Cook, durante la keynote en la que se mostró el nuevo modelo de teléfono.
“Todo lo que no fuera la esencia Apple era superfluo. ¿Por qué hemos tardado tanto tiempo en darnos cuenta? Durante años nos hemos preocupado por hacer baterías más duraderas cuando la respuesta correcta era eliminar la batería”, explicó el ejecutivo. “¿Cuánta gente usa realmente la pantalla del móvil? Muchos… pero eso es porque la tienen. Cuando no la tengan se darán cuenta de que no la usan”, concluyó.
La cámara, los conectores, la antena, la pantalla, la superficie táctil, los chips, la batería, el giroscopio, la tarjeta sim, el altavoz, el micrófono y el flash son ahora considerados accesorios y se venderán por separado.
“El nuevo iPhone es un iPhone, eso es lo importante, lo demás sobraba”, zanjó Cook.
Al final de la presentación, Tim Cook presentó un modelo de Apple Watch que ni siquiera dispone de dimensión física y cuya única funcionalidad es que vale dinero.
