El calentamiento global, combinado con el uso excesivo de pesticidas y la producción en masa, está degradando la vida en el planeta hasta el punto de que esta semana en Valencia se ha descubierto el primer árbol analfabeto que da «mondarinas». Los viólogos con uve aseguran además que sus «ojas» no llevan hache.
«Las mondarinas dan ‘sumo’, con ese, y al probarlo notas que algo le falta, principalmente falta de ortografía», explican los viólogos expertos en flora iletrada.
Las «mondarinas» de este árbol son de un vivo color «naranga» y pueden identificarse claramente porque crecen con una franja roja en la base, pues las señala el corrector.
«Hay que poner punto final a esta degradación porque, si no, aparte de no oler a nada y no saber a nada, la fruta pasará a no significar nada», insisten los viólogos.
