Juan Pedro Rosal, natural de Reus, ha descubierto esta mañana la presencia de tres hombres atrapados en el interior de la funda del nórdico. Los individuos, con síntomas de desnutrición y asfixia, se habían ido acumulando en los últimos meses y, según han confesado, otras seis personas habían logrado escapar días antes por un pequeño descosido del lado inferior izquierdo.
Al parecer, las víctimas se alimentaban de las migas que caían en la cama los domingos, cuando el matrimonio desayunaba en el dormitorio. Los agentes de bomberos que los han rescatado confirman que los tres «han recibido el justo castigo del marido, que se ha concretado en ráfagas de gas metano que casi acaban con ellos».
«Llego tarde a casa, muy cansado, y me quedo dormido nada más reposar la cabeza sobre la almohada. Es fácil que no me dé cuenta de estas cosas», confiesa Rosal, cuya esposa ha confirmado que conoce a estos tres hombres «aunque lo nuestro fue hace muchos meses, cuando mi marido y yo estábamos en crisis».
La mujer asegura que ha intentado limpiar el honor de su marido varias veces «poniendo la funda en la lavadora y en la secadora, pero a esos tres se les quedaban pegadas las sábanas».
También argumenta que «todo esto no habría pasado de haber comprado el armario para los abrigos que llevo tiempo pidiendo», insinuando que los amantes se habrían podido acomodar en él.
Juan Pedro Rosal admite que se ha quedado helado al descubrir la presencia de los amantes de su mujer. «La verdad es que abrigaban y justo ahora empieza a hacer un frío de la hostia», sentencia.
