Anunciando que “cualquier día de estos” tomará una decisión drástica respecto a su perilla y cambiará su clásico aspecto, Jaime Cabalgador, de 53 años, ha empezado a perder la fe en la perilla que luce desde los 23 años y en la que ha confiado ciegamente durante toda su vida adulta, han informado fuentes cercanas a la crisis de los cuarenta.
“¿Qué pensáis vosotros de la perilla esta que llevo últimamente?”, dijo ayer Cabalgador en medio de la cena refiriéndose a las tres últimas décadas de su vida y haciendo enmudecer a su familia con el comentario. Sus hijos han informado de que Cabalgador estaba especialmente interesado en saber si la barba, tal y como la lleva, le hace parecer “un poco mosquetero”.
“¿No os parece un poco ridícula? No sé qué pensar”, insistió mientras se acariciaba la barba perfectamente perfilada en torno a su boca y a la que ha permanecido fiel desde la universidad. “No sé, quizá cambiar un poco no estaría mal”, añadió ante la estupefacción de su familia.
Las fuentes han informado que, mientras la familia descansaba frente al televisor, Cabalgador estuvo mirándose en la pantalla del móvil y diciendo “no sé yo, no sé yo…”.
“Tras 22 años con él, debo decir que es la primera vez que le veo flaquear en sus convicciones más profundas”, ha confirmado su mujer. “Estoy impresionada pero también me da miedo que se esté haciendo preguntas que quizá no debiera hacerse”.
A última hora de la mañana de hoy, fuentes de la familia han informado que la intención de Cabalgador es seguir con la perilla pero intentando estilizarla un poco más, “quizá haciéndola más fina en los laterales» y adecuándola a los tiempos actuales.
