Pidiendo perdón y lamentando la humillación, miles de vascos se han visto obligados a ponerse hoy una camiseta a causa de la drástica bajada de temperaturas y del temporal de frío que azota la península, según han informado diversos medios.
“Es verdad que refresca un poco”, admite Andoni Baltz, de Bilbao, completamente cubierto de nieve y hielo. Según dice, se ha visto obligado a abrigarse con una camiseta de tirantes para no discutir con su mujer.
Los vascos confirman que, por ahora, no tienen pensado sacar el paraguas porque “solo hace un poco de humedad” ni tampoco pasarse al pantalón largo porque no tienen, dado que no le encuentran utilidad alguna.
Al cierre de la edición, algunos hospitales de Euskadi han informado de que los vascos más débiles han acudido a Urgencias al ver que tenían carne de gallina y asustarse.